martes, 21 de agosto de 2007

Retorno

Casi dos meses de silencio. Durante algún tiempo pensé en cerrar el blog. Estaba casi convencido que mi planteamiento inicial no podía desarrollarse en los términos planteados.

Dos meses flirteando con realidades que hasta hace poco ni me molestaba en considerar. Difícil imaginar que acabaría aficionándome al hatha yoga y que leería libros acerca del minimalismo y del zen.

Quizás sea por ello que me siga acordando a día de hoy del cielo azul de Wyoming, de Idaho y de Utah, mientras leo los haikus que el fotógrafo Ed Firmage deja caer en su “Red Rock Yellow Stone”.

Sin esperarlo ni buscarlo he encontrado un nuevo terreno por explorar. No es un terreno vírgen. Otros los han recorrido previamente.

Es una perspectiva distinta sobre los mismos objetos. No un cambio radical. No habrá túnica naranja, ni repetición de mantras ni cambios de religión. Demasiado viejo para eso.

Solo, un cambio de luz en la fotografía, tenue, sutil.
Una distinta entonación en la frase que se repite.
Una variación en los ritmos habituales.

Solo matices, solo discretos silencios en las palabras de ayer, solo acentos suaves en el papel manchado de tinta.

No hay comentarios: